Ya hemos terminado la temporada (O casi, aún quedan dos partidos) y se han cumplido los peores augurios para el Barça. Terceros en la clasificación, rondita previa este verano y sin levantar ninguna copa que no contenga alcohol.
Lo peor de todo es que han tenido un año para remediar los males de este equipo, que no son otros que la falta de disciplina del vestuario, y no se ha hecho nada. Las tan anunciadas medidas que prometió Joan "al loro" Laporta el pasado verano han caído en saco roto.
Ahora es cuando la prensa, quizás por su ímpetu de querer vender periódicos, empieza a denunciar lo que la afición ya sabía desde hacía tiempo: Laporta es un inútil y los jugadores una banda de sinvergüenzas peseteros que pasa de todo porque se han consentido demasiadas cosas.
A mi también me gusta vivir bien y salir por las noches, pero eso no impide que me levante cada mañana para ir a trabajar 8 horas en condiciones aceptables para desarrollar mi trabajo sin inventarme excusas para no ir a trabajar.
A esta plantilla (de las mejores del mundo) se le han consentido demasiados excesos, y ahora, el "amigo" Laporta quiere solucionarlos echando a media plantilla y cambiando a Rijkaard por Guardiola. Con estas ideas de bombero torero, solo me viene una imagen a mi cabeza, y que es posible que volvamos a ver la temporada que viene:
Que dios nos pille confesados.
1 comentario:
Tienes razón, el Barça ha hecho el tonto... Pero al menos la selección parece hacerlo mejor en la Eurocopa... Nos están dando esperanzas. Menos mal de los jugadores catalanes ;-)
Publicar un comentario